viernes, 2 de diciembre de 2011

Nunca se termina de aprender


Mi nombre es  María Teresa Quiroz, Nina para mis  amigos, me cambió la  vida radicalmente cuando, en 2004,  decidí  seguir el curso de Apicultura que INACAP impartía durante 350 horas –teóricas y prácticas-  en la localidad rural de San Vicente de Naltahua, Isla de Maipo. Me cambió la vida porque cuando ya han pasado siete años desde que, con timidez, ingresé a esta capacitación laboral, hoy por hoy puedo ganarme la vida con los  1.200 kilos de miel que entregan  los doscientos panales que poseo. Y no sólo eso, tengo, además, grandes perspectivas para el futuro de seguir implementando este proyecto que me ha dado tantas satisfacciones.



No hay comentarios:

Publicar un comentario